Un Camino de Sanación Integral
Como Terapeuta Integral del Alma y Bienestar Emocional, quiero compartir una experiencia personal que, aunque no es la primera que he tenido, es la primera vez que decido hacerlo de manera abierta. A mediados de enero, mientras jugaba al pádel, sufrí una lesión en la cadera. Al principio, pensé que se había solucionado rápidamente, pero las molestias persistieron. Tras una consulta médica y una ecografía, me diagnosticaron trocanteritis. Además, mencioné un dolor en el pie, y un neuroma de Morton fue también diagnosticado.
El tratamiento convencional consistió en sesiones de rehabilitación con radiofrecuencia y láser para aliviar el dolor, además de la recomendación de realizar una resonancia magnética para evaluar el neuroma con más detalle. A pesar de que todo esto estaba en marcha, mi enfoque como terapeuta integral siempre busca algo más profundo: la causa emocional y espiritual de las enfermedades. Fue aquí donde entró en juego la biodescodificación biológica.
La Biodescodificación de la Trocanteritis
La trocanteritis, o inflamación del trocánter mayor del fémur, está frecuentemente relacionada con el estrés y la tensión acumulada en la vida cotidiana. Según la biodescodificación, esta afección está vinculada a la frustración y a la sensación de estar «bloqueado» en ciertas áreas de la vida. El trocánter simboliza la estabilidad y la capacidad de moverse hacia adelante, por lo que cuando esta zona del cuerpo está afectada, puede reflejar que la persona está experimentando conflictos emocionales relacionados con la movilidad, ya sea en un proyecto, una relación, o incluso con una parte de sí misma.
En mi caso, la trocanteritis coincidió con un proceso importante en mi vida: la venta de una propiedad. Esta decisión me generaba muchas dudas sobre si era la correcta, creando un agotamiento emocional que no solo afectaba lo material, sino también mi identidad y estabilidad. A medida que comencé a trabajar en desactivar este conflicto emocional, mi bienestar físico mejoró significativamente.
La Biodescodificación del Neuroma de Morton
El neuroma de Morton, una afección dolorosa en los nervios entre los dedos del pie, también tiene una carga emocional importante. Este trastorno está asociado con la sensación de estar atrapado entre dos opciones, sin poder avanzar con claridad. El pie, como símbolo de base y apoyo, refleja nuestra capacidad para tomar decisiones y avanzar en la vida. Así, un neuroma podría indicar la sensación de no poder avanzar o tomar decisiones claras, un reflejo de conflictos internos y miedos sobre el futuro.
Al trabajar en mis bloqueos emocionales, entendí que el dolor en mi pie no solo era físico, sino una oportunidad para revisar mis miedos y mis inseguridades. Descubrí que mi pie, al igual que mi vida, necesitaba dirección. Al abordar este conflicto emocional, el dolor disminuyó significativamente.
La Sanación a Través de la Energía
Lo más revelador de esta experiencia fue la intervención de mi hija, quien, al conocer mi proceso de desactivación emocional, me ofreció un apoyo único para mitigar el dolor mientras la biodescodificación hacía su trabajo. Ella creó, con su intuición chamánica, una fórmula exclusiva de aceites esenciales concentrados en una vela. Aplicando el aceite caliente sobre las zonas afectadas, el dolor comenzó a disminuir notablemente. Desde el primer día, el alivio fue casi total, y esa conexión de sus manos con su sabiduría ancestral me recordó el poder auto-curativo que todos poseemos y que solo tenemos que activarlo. Esta fórmula no es un producto comercial, sino un arte hecho por sus manos y energía chamánica.
La Importancia de la Desactivación Emocional
En la biodescodificación, el proceso de «desactivación» emocional es esencial. Este proceso consiste en identificar las emociones atrapadas que alimentan el dolor físico. Mi cuerpo no solo estaba reflejando una lesión física, sino también mi incapacidad para liberar ciertas emociones no resueltas. A medida que comencé a trabajar en la sanación emocional, me sentí más ligera, en paz, y el dolor disminuyó gradualmente.
Reflexión Final
Apenas han pasado cinco días desde que me diagnosticaron, y el dolor ha desaparecido por completo tanto en mi pie como en mi cadera. Este proceso no solo ha sido una lección sobre cómo las emociones impactan el cuerpo, sino también una revelación sobre la importancia de escuchar nuestro cuerpo y reconocer que las emociones no resueltas pueden manifestarse físicamente. Como terapeuta integral, siempre recomiendo buscar la ayuda de especialistas médicos para obtener un diagnóstico adecuado. Sin embargo, el camino hacia la sanación completa también requiere mirar dentro de nosotros mismos y trabajar en la liberación de las emociones atrapadas.
La biodescodificación es una herramienta poderosa que nos permite sanar no solo lo físico, sino también lo emocional, ayudándonos a encontrar el equilibrio y la paz que necesitamos para vivir una vida plena.
Conclusión: Sanación Integral desde el Alma
A lo largo de este proceso, entendí que las dolencias físicas no son simples accidentes o enfermedades. Cada dolor tiene un mensaje profundo que nos invita a sanar. Al integrar tratamientos convencionales con enfoques emocionales y espirituales como la biodescodificación, descubrimos un camino hacia el bienestar integral. Este camino nos permite sanar tanto el cuerpo como el alma, brindándonos la oportunidad de vivir una vida más plena y consciente.
La experiencia vivida con la trocanteritis y el neuroma de Morton ilustra cómo los aspectos emocionales y físicos se entrelazan profundamente. La trocanteritis, vinculada a sentimientos de frustración y bloqueo, coincidió con un momento de incertidumbre en mi vida, la venta de una propiedad. A la par, el neuroma de Morton reflejaba mis miedos sobre avanzar hacia un futuro incierto. Ambas afecciones fueron señales de conflictos internos que, al abordarlos emocionalmente, mejoraron significativamente. La biodescodificación y el acompañamiento energético, como el aceite elaborado por mi hija, fueron claves en este proceso de sanación integral.
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